El Campo vs El Gobierno 2

Ahora la parte espiritual de todo esto que está pasando en nuestro querido país.

Es la clásica lucha entre el bien y el mal. K es la representación más acabada de un diablillo sediento de poder y dinero (nunca van separados). Lo que no logró la guerrilla en los 70 (por culpa de los militares) ahora lo está logrando. Intenta imponer un estado omnipotente y perpetuarse en el tiempo para dominarnos a todos y que hagamos sólo lo que él quiere. Usa dicursos maravillosos pero en la práctica hace todo lo contrario, como hace Chávez en Venezuela. Utiliza cortinas de humo para distraer a la gilada. Les da a esa gente migajas que aceptan gustosos por una porcioncita de poder o alimentos o plata porque nunca tuvieron nada y no tendrán hasta que sus karmas se lo permitan. Porque aunque hubiera 10.000 Natty Petrosino ayudándolos no saldrían de la pobreza, porque está escrito que sea así (en esta vida están pagando deudas de vidas anteriores). Lo que no quiere decir que nos quedemos así y no hagamos algo para ayudarlos. Muchos los ayudan, pero es Dios quien tiene la última palabra sobre su condición. Entonces K utiliza a esta gente como sus aliados (que no lo son porque los tiene que llevar en colectivos y pagarles) para hacer creer que él es el único que hace algo por ellos. Da vuelta todo lo que puede en su favor, no para realmente ayudarlos, sino para usarlos en provecho propio. Esto está clarísimo. La gente que piensa (los que salieron a protestar y los ruralistas) lo están descubriendo ahora y se rebelan, son los que piensan diferente y no se dejan mandonear o comprar por nadie porque siempre tuvieron pensamiento propio. (Cuando A. Fernández dijo que la Capital era una isla, después de las elecciones de octubre, estaba confirmándoles a los que no votaron por CFK porqué no la habían votado). K instala la lucha de clases como cortina de humo. La gente que piensa no lo compra ni compra las retenciones y ya no quiere saber más nada con este autoritarismo. No son golpistas, reclaman lo que es justo, nada más. Quieren gobernantes que sean verdaderos servidores públicos, no declarativos.

Las fuerzas de Dios se dan cuenta de todo esto y nos transmiten que no nos dejemos engañar, que nos mantengamos serenos, no confrontemos, que nos pongamos firmes en nuestras convicciones de honestidad y amor hacia el prójimo pero que pidamos que se haga lo que es justo para todos. Amar es exigir que los demás hagan las cosas bien, también; es nuestra responsabilidad. (Esta es una frase de Natty Petrosino). Dios hizo que la gente saliera a la calle espontáneamente y la oscuridad la embarró cuando mandó a D'Elia a patotear. Ahora los K están con una encrucijada, no pueden reprimir a los ruralistas porque nunca lo hicieron con los piqueteros. Pero Dios sabe más y aunque les manden las fuerzas del orden, los ruralistas sabios van a abrir los piquetes sin violencia (ya lo están haciendo). No se justifica dejar sin alimentos a las ciudades, eso también es ir en contra del prójimo, en contra de Dios. Las aguas se van calmando y el panorama se va aclarando. Los K van a tener que ceder porque sino van a perder mucho más. O sea que por ahora gana Dios, (en realidad siempre gana Dios en definitiva). Aunque todavía no se vislumbre. Ya veremos con que se vienen en el futuro los K, porque siempre hay que estar atentos.
© CaminoAcasa 2008